Sentido de la Estación de Penitencia a la Catedral (2013)

El Obispado de Cádiz y Ceuta ha publicado una serie de consejos e instrucciones relativas a la Estación de Penitencia de las Cofradías en la Santa Iglesia Catedral, para su observancia por parte de cada Hermandad y de todos los penitentes, con independencia del lugar que ocupen en la procesión.

Ante todo debemos tener en cuenta que la Semana Santa es un CAMINO

- Que no hacemos solos
- Que hacemos a través de la liturgia y las manifestaciones de religiosidad popular.
- Que nos lleva a vivir el misterio de la Resurrección de Jesucristo en plenitud, renovando nuestra fe.
- Que es la expresión de todo nuestro trabajo y esfuerzo a lo largo del año.

Planteémosnos las siguientes cuestiones:

Antes de la estación de penitencia: 


1. ¿Tiene sentido vestir la túnica sin vivir la hermandad?
2. ¿Nos hemos reconciliado con nuestros semejantes? ¿Hemos usado el sacramento de la Reconciliación?
3. ¿Cuándo fue la última vez que rezamos? ¿Por qué no lo haces ahora, mientras lees este artículo?
4. La estación de penitencia comienza en nuestra propia casa. Por ese motivo, los cofrades somos tan insistentes en la importancia de hacer el camino a la Iglesia con el hábito puesto y la cara cubierta.

Oración para recitar antes de vestirse con el hábito:

Padre, me dispongo a vestir la túnica de mi Hermandad. Pongo en tus manos mi vida, para que sea testimonio creíble de la fe que profeso. Revestido con la túnica, quiero caminar junto a mis hermanos, siguiendo los pasos de Jesús, tu Hijo, que camina hacia el Calvario. Que veamos en el esfuerzo, el sacrificio, la oración y el silencio, la más bella ofrenda que podamos ofrecer. Que mostremos al mundo la belleza del amor entregado. Y junto con la Iglesia, contemplemos al que traspasaron, para que pasando por el umbral de la muerte proclamemos gozoso que Cristo, el Señor, ha resucitado. TE lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor. Amen.

A continuación recemos el Padre Nuestro, el Ave María y Gloria.


Durante la estación de penitencia:

1. Si acompañamos a Jesús Nazareno y a la Santísima Virgen de los Dolores, ¿nos acordamos de ellos? ¿por qué no rezarles?
2. Nuestro Padre Jesús Nazareno representa a Cristo con la cruz a cuestas sufriendo camino del Calvario. Medita sobre este pasaje bíblico.
3. A lo largo de nuestra estación de penitencia tal vez veamos a otros penitentes rindiendo culto a Jesús orando en el Huerto de los Olivos y a Jesús con la cruz a cuestas en el encuentro con la Virgen María y sus discípulos. Medita también sobre estos pasajes de la Pasión.
4. Recuerda en todo momento que la penitencia no es otra cosa que ofrecer nuestro esfuerzo, nuestro cansancio, como prueba de nuestra inquebrantable compromiso por Cristo. Proclama tu fe.

Tras la estación de penitencia: 

1. Demos gracias a Dios por la salida procesional.
2. Volvamos a casa con actitud de recogimiento. Ten en cuenta que la estación de penitencia no concluye hasta que llegamos a casa y nos quitamos el hábito.
3. Al quitarnos el hábito, demos nuevamente gracias a Dios. Cuida y mima tu hábito porque forma parte de tu encuentro anual con Cristo.
4. Durante el resto del año sigue viviendo la fe que has profesado.