Miles de personas iniciaron el 2015 ante Jesús Nazareno

La celebración de la Festividad del Dulce Nombre de Jesús, cada 2 de enero, es una de las citas más hermosas de las que se viven en Santa María a lo largo del año. Es un día muy especial, con un ambiente de auténtica fiesta. Da la sensación de que los fieles que acuden a besar la mano de Jesús Nazareno lo hacen con otro talante, como si se hubiesen desquitado de todo lo malo del año anterior y afrontaran el nuevo curso con la esperanza de que todo mejorará, que es lo que le piden a Jesús. Si los caprichos del calendario hacen que el 2 de enero coincida en viernes, la presencia de fieles con nuevas esperanzas e ilusiones se convierte en masiva.

Así aconteció el pasado viernes. Desde las ocho de la mañana y durante toda la jornada, miles de devotos acudieron al encuentro de Nuestro Padre Jesús Nazareno para besar su mano y pedir su amparo en este 2015. En algunos momentos, las colas de personas esperando el besamano llegaba casi a la calle. Ante ellos, Jesús se mostraba exuberante en un bellísimo altar efímero elaborado por la Mayordomía de la Hermandad.

A las 8 de la tarde y en una Iglesia de Santa María repleta de fieles comenzó la Función Solemne en honor al Regidor Perpetuo. La Eucaristía estuvo presidida por el Rvdo. D. Ricardo Jiménez Merlo, que volvía a cumplir su cita anual con su Nazareno de Santa María, y concelebrada por nuestro Director Espiritual, Rvdo. D. Balbino Reguera, y por el Rvdo. D. Rubén Jesús Virúes Gómez, Párroco de San Pío X de La Línea de la Concepción. Como es tradición, la celebración contó con el acompañamiento musical de la maravillosa voz del cantaor de Santa María, Juan Romero, que nos volvió a emocionar con sus sentidas oraciones cantadas. A la celebración también asistieron representantes del Excmo. Ayuntamiento de Cádiz, del Consejo Local de Hermandades y Cofradías y de la Asociación de Amigos del Monasterio de Santa María.

El Padre Ricardo centró su homilía en la definición de Jesús como Salvador e invitó a los fieles a seguir su camino y su ejemplo en este nuevo año que comienza. En el apartado de las peticiones, tuvimos un recuerdo especial por los hermanos enfermos y difuntos, especialmente por D. Cayetano del Toro, y por las Hermanas Concepcionistas, para que este año 2015 sea, de una vez por todas, el de la vuelta a Casa. 

Al término de la Eucaristía, se produjeron los actos que se refieren en noticias aparte, como la entrega de los primeros diplomas a aquellos que acumulan al menos 25 años como Hermanos de la Cofradía, o la entrega del donativo de la Cofradía a las Rvdas. Madres Concepcionistas. Por último, un matrimonio de hermanos residentes en Córdoba quiso hacer entrega a Nuestro Padre Jesús Nazareno de una hermosísima donación consistente en una preciosa joya de oro en forma de azucena con incrustaciones en piedras preciosas, con el valor aún mayor de haber sido el fruto del propio esfuerzo y del trabajo artístico de los donantes.

Para concluir una jornada intensísima y repleta de momentos especiales, se volvió a cumplir el hermoso ritual de la visita de una representación de cofrades de la Hermandad Sacramental de la Sagrada Cena, presidida por su Director Espiritual, el por todos querido Padre Pascual Saturio Medina, y del Hermano Mayor de la Corporación, D. José María Caro, para rezar ante Nuestro Padre Jesús Nazareno las Letanías del Dulce Nombre de Jesús.

Por último, te ofrecemos un testimonio gráfico de cuanto dio de sí la primera fecha de referencia en el año para los devotos de Nuestro Padre Jesús Nazareno.